Ya sea “Brainfood”, “Moodfood” o “Healthy Food”, la gastronomía de élite ha descubierto la salud y crea platos al gusto sin grasa, lactosa, gluten o hidratos de carbono, recurriendo a otros alimentos más sanos.
Ya lo dice el refrán: “cada día una manzana y tendrás una vida sana”. En la medicina tradicional china, la elección de los alimentos ha desempeñado siempre un papel clave para prevenir y tratar las enfermedades. También los conocimientos obtenidos por la medicina nutricional se tienen cada vez más en cuenta en los menús de los restaurantes.
Primero fueron los sospechosos habituales los que desaparecieron de las cocinas de los restaurantes, dando lugar a la “Clean Food”: glutamato y gluten, salsas grasas y guarniciones cargadas de hidratos de carbono y sustancias alergénicas. Luego siguió el uso consciente de alimentos que potenciaban ciertos aspectos de una alimentación sana. La verdura tiene un efecto básico que contrarresta los ácidos en el cuerpo, y ayuda a prevenir la celulitis y a mantener unas piernas y brazos tersos.
Así, un plato vegetariano se convierte rápidamente en “Beauty Food”: el chocolate negro contiene muchos pseudoalcaloides, que tienen un efecto relajante y la seroterapia y dopamina de los plátanos tienen un efecto estimulante del ánimo. Así que ¿no resulta obvio ofrecer un plátano con manto de chocolate negro y convertirlo en un postre de buen rollo? Quien quiera hacer algo conscientemente para cuidar su capacidad de rendimiento y concentración tirará de la Brain Food, y es que no en vano un 25% de lo que comemos se destina a proporcionar alimento a nuestro cerebro.
Así que a por el hierro de los alimentos, que se encarga del transporte del oxígeno en nuestro cuerpo a través de la hemoglobina y a por los ácidos omega 3, que forman un componente esencial de la membrana exterior que cubre nuestras neuronas. El resultado luego en el menú: “Tierra y Mar”, o un filete de res o de salmón poco hechos para darle combustible al cerebro. Para acompañar un jugo de mezcla de frutas o smoothie, que aporta vitaminas y sustancias vegetales bioactivas a las neuronas y potencia el riego de nuestro cerebro.